Mitos y verdades del ejercicio

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Llegó el verano y con él las ganas de lucir un cuerpo tonificado y saludable. Para ello, hacer ejercicio diario es fundamental, incluso si la idea es bajar esos kilitos de más que las celebraciones de fin de año nos dejaron de regalo, la clave consiste en realizar una actividad física que le permita quemar calorías.
Sin embargo, hay que tener cuidado ya que la ignorancia, la falta de equilibrio y preparación al hacer ejercicio puede convertirse en un deterioro más que un beneficio para su salud.
Por ello, Leonel Lozano, Deportólogo del Club Médico Deportivo Bodytech, resuelve algunas dudas y cuestionamientos recurrentes que se han creado sobre los ejercicios.
MITO 1: El abdomen se reduce solamente con ejercicios abdominales y fajas
VERDAD: Falso. Para bajar la barriga, lo primero que debe hacer es llevar una dieta balanceada, recomendada por su nutricionista según lo que necesite. Así mismo, debes hacer tareas aeróbicas y continuas, de moderada intensidad, en un promedio entre 20 y 45 minutos. Cuando haya perdido el exceso de grasa, entonces sí puede trabajar los músculos con abdominales. Esto pasa porque cuando hay grasa en el tejido subcutáneo (que da prominencia a la zona), hacer abdominales sin un trabajo aeróbico (que degrade grasas), lo único que produce es dar más volumen. Asimismo, las fajas tienen características de modificar la distribución de las células grasas bajo la piel, como lo hace un cinturón, pero no estimulan la quema de grasa. La sudoración local no tiene ningún impacto sobre la quema de grasas.
MITO 2: La grasa se endurece con las pesas
VERDAD: Falso. El tejido graso tiene fibras de tejido conectivo, que están sujetas a la capa muscular subyacente. Cuando esos músculos están flácidos, la grasa no tiene suficiente soporte y parece blanda. Una vez que se fortalecen los músculos, las fibras de soporte se tensan, lo que le da a la grasa una apariencia más firme, pero sin modificar su composición interna.
MITO 3: Sin complementos proteicos es imposible aumentar la masa muscular
VERDAD: Falso. Contrario a lo que se cree, las proteínas de la dieta sí pueden aportan la suficiente cantidad de aminoácidos para aumentar la masa muscular. Claro, en algunos casos, se incluyen los complementos proteicos para mejorar el aporte nutricional si el practicante no puede modificar su dieta o cuando sus requerimientos son mayores.
MITO 4: El organismo convierte en grasa corporal todo lo ingerido después de las 8 p.m.
VERDAD: Falso. No existe evidencia que compruebe que comer por la noche engorda. Si comes una toronja con papaya no afectará tu peso, por ejemplo. Además, pasar varias horas sin comer durante la noche puede hacer que tu organismo retenga más fácilmente lo primero que comas en la mañana (y seguramente será algo rico en calorías, pues es lo que tu cuerpo te va a pedir por la baja en el nivel de azúcar). Lo que sí está claro, es que no alimentarse bien durante el día nos hace comer en exceso durante la noche y esto causa un aumento del peso corporal. En cambio, las personas que realizan una dieta adecuada para bajar de peso se alimentan de la manera apropiada durante el día; se acostumbran a cenar ligero, sin caer en la tentación de consumir calorías extras.
MITO 5: Hay que hacer ejercicio en ayunas para perder peso
VERDAD: Falso. Esta práctica nunca es recomendable. Se requiere un aporte mínimo de calorías provenientes de los alimentos para comenzar el ejercicio, pues en ayunas se incrementa el riesgo de deshidratación, hipoglicemia o mala tolerancia al esfuerzo.
MITO 6: Sudar mucho ayuda a perder peso
VERDAD: Falso. Muchas personas creen que al sudar pierden peso y por eso hacen deporte cubiertas con ropa gruesa, se envuelven con fajas o pasan horas en el sauna con la intención de sudar lo más posible, pues piensan que cuanto más suden más peso perderán. Esta práctica está absolutamente contraindicada puesto que no sólo no se consigue perder peso (lo que se pierde es sólo agua y en cuanto se repone se recupera el peso perdido). De igual manera, se corre el riesgo de deshidratarse, además impide quemar grasas, pues estas no se pueden eliminar cuando hay deshidratación. De igual manera, sudar en exceso puede causar alteraciones importantes en las funciones que realizan los sistemas cardiovascular, metabólico y endocrino. Finalmente, puede causar la pérdida de sodio y potasio, lo que puede producir calambres. Por eso, durante el ejercicio hay que hidratarse constantemente.
MITO 7: El único horario adecuado para hacer ejercicio es en la mañana
VERDAD: Falso. Aunque las reservas energéticas y la sensación de descanso son evidentemente mayores en la mañana, también se tiene menor velocidad de reacción y las estructuras osteomusculares están “frías”, lo cual mejora en el transcurso del día con las actividades cotidianas. Así que cualquier hora es adecuada.
MITO 8: Las mujeres no deben de hacer pesas 
VERDAD: Falso. Las mujeres tienen por naturaleza menos masa ósea y muscular que los hombres, así como un perfil hormonal diferente. Uno de los beneficios de las pesas en mujeres es que ayudan a incrementar su metabolismo, el cual depende del músculo tonificado, lo que les permite quemar más caloría en reposo y emplear con mayor rendimiento la grasa corporal.
MITO 9: Después de cierta edad, el ejercicio no nos ayuda a mejorar
VERDAD: Falso. Los beneficios del ejercicio son innumerables, ayudando a combatir problemas como la hipertensión, la diabetes, las enfermedades cardiacas, el cáncer, el asma, la osteoporosis, la demencia, la artritis y artrosis, y la epilepsia, entre muchas más. Por supuesto, se requiere una valoración inicial para determinar el tipo de programa que le conviene.
MITO 10: Sin dolor, no hay ganancia
VERDAD: Falso. Las recomendaciones para la práctica del ejercicio nos dicen que durante su práctica se debe sentir esfuerzo físico pero en ningún momento dolor, pues esto nos indicaría que la ejecución es inadecuada, que las cargas aplicadas no son las correctas o que tienen una lesión persistente. Tampoco debe de persistir el dolor luego del ejercicio, en este caso debe consultar con profesionales del ejercicio.

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